Primera parte: La no evolución

Observemos a la madre (foto 1) y al padre (foto 2), en una mano su hijo y en la otra el móvil. 

Después de leerme unos cuantos capítulos del libro "amor líquido" confirma lo que yo ya tenia en mente. 
La sociedad avanza, pero con esa evolución, el ser, el individuo, pierde mucho en el camino. 
Ahora mismo si intentara aislarme para poder estar solo me sería realmente difícil. 
Digo yo, para ponerme como ejemplo, pero no es que me guste globalizar, pero almenos a una gran mayoría le costaría. Llevamos siempre con nosotros un pequeño aparato, que parece que forme parte de nuestro cuerpo, y que muchas veces sin él, creeríamos que estamos perdidos, o almenos ese pensamiento es el que nos ha inculcado nuestra sociedad. Si, efectivamente, hablo del móvil.  ¿Podríamos soportar el vivir sin el móvil o irnos al extremo del mundo sin ese aparato?

Creo que la respuesta es no. Quizás un tiempo si, y nos sentiriamos orgullosos por estar una semana o dos semanas sin el móvil, nuestro orgullo estaría fuerte y empezaríamos a pensar: -Que bien, yo puedo estar sin móvil- Una gran mentira...
Al cabo del tiempo, volveríamos al lugar donde lo dejamos, simplemente para ver que aún sigue ahí -Excusa- 

Tenemos adicción a ese montón de cables. Es como el tabaco, imposible de dejar. Y al cabo del tiempo, por alguna excusa, alguna "necesidad" volveríamos a por nuestro amigo. Tenemos una gran dependencia, y es un problema, casi cualquier cosa es buena sin abusar.
Tenemos que estar agradecidos, a él, la comunicación es más fácil, nos podemos comunicar desde cualquier parte del mundo, y estar todos interconectados, ¿Y antes como se comunicában los demás? ¿Con señales de humo o simplemente ni se comunicaban? ¿La gente moría de dolor ante la no comunicación rápida? Claro que no, quizás exagero en esas comparativas, pero duele ver como por culpa de la evolución tecnológica, la cultura, el arte y algunos rituales, desaparecen, mueren o quedan en un rincón en el olvido. Me refiero al arte de la escritura a mano, al arte de escribir a puño y letra, y según que tipo de escrito, con un gran toque emocional.

Seguramente, muchos me contestarían, -Pero ahora es más rápido, más sencillo... -Y no lo negaré, seguramente es más bonito escribir TQM en un mensaje digital, que te quiero a mano, incluso, es más fácil, preguntar cómo estás en un mensaje de texto, que quedar con esa persona... ¿Verdad? Esta última comparación, me da pie a exponer uno de los miles de inconvenientes que conlleva la creación del móvil o de la evolución de la tecnología, la perdida de la comunicación. Pero antes me gustaria, mostrar, un artículo que encontré en internet, de un chico joven que exponía lo siguiente:

"Hace semana he vuelto a escribir a mano. Creo que no lo hacía, salvo alguna anotación esporádica, desde que dejé la facultad de periodismo. Sí, lo se, no es como para estar orgulloso, pero teniendo en mi casa una agenda electrónica, un smartphone, un portátil, un sobremesa y un TabletPC, hay muchas más posibilidades de que encuentre antes un teclado que un bolígrafo. No me pasa sólo a mí. Todos mis amigos y familiares han dejado de escribir de la forma tradicional.
No me pasa sólo a mí. Todos mis amigos y familiares han dejado de escribir de la forma tradicional. Las cartas se han convertido en e-mails y las postales son ahora mensajes multimedia. Mi caso es grave, ya que incluso en las ruedas de prensa prefiero escribir en el móvil o en una PDA antes que en los bloc de notas que han acompañado al periodista desde los inicios de esta gloriosa profesión. Por supuesto, mis colegas suelen mirarme como a un bicho raro. Es indudable que se escribe más rápido y de forma más cómoda con la tradicional combinación de papel y tinta. Para mí, sin embargo, no tiene el mismo encanto."

Luego empieza hacer propaganda de las nuevas, pda y sus ventajas, rapidez, ligereza etc... Con todos sus grandes precios..
Eso demuestra, que ha parte de ya quedarse absoleta la escritura a mano por la evolución, nuestra sociedad, tampoco lucha por almenos, no borrarla de nuestro presente.